Charlize es una diosa

Charlize es una de las mujeres más bellas del mundo, todos lo vemos. Por eso, no nos cuadra que ella sea la Reina Ravenna y la Kikis sea Blancanieves. No tiene sentido alguno. Charlize es impresionante y la otra es... Una cosa. Si no, mirad las portadas de Vogue.

En esta primera, tenemos a la Kikis. Photoshop que le deforma la cara, cejones negros y caritas de asco.

En esta tenemos a Charlize. Impresionante y perfecta. Piernas interminables y sin un gramo de celulitis. Rasgos envidiables y una elegancia que muchas envidian.

Charlize consigue que la portada de la Kikis se vea más ridícula de lo normal. Los estilismos, la pose, el maquillaje, el saber estar... Y para que negarlo: la cara. Charlize le saca más de 10 años y consigue verse mucho mejor que la otra de 21. Por eso, no entendemos por qué la Kikis se empeña en comprar portadas cuando todas son epic fail. Como ejemplo, miremos la próxima de Elle y la próxima de Vanity Fair.

Nos alegra saber que Charlize es de las nuestras. No soporta a la Kikis y la ridiculiza con cada mirada.