Por eso, es increíble, y tremendamente ignorante, que las enfermas digan que nadie fingiría una relación para vender una película.
Pasa constantemente y la duración de dicho montaje varía en función del éxito de la película:
- JLo y Ben Affleck. Ellos tenían que vender Gigli. Ellos se paseaban por todas partes y ella le "dedicaba" canciones. Planearon una falsa boda que se anuló cuando la película fue un completo fracaso.
- Tom Cruise y Penélope Cruz. Su relación surgió durante el rodaje de Vanilla Sky y terminó poco después. Nada nuevo.
- Scarlett Johansson y Ryan Reynolds. Ellos tenían que terminar de despegar y qué mejor que un matrimonio para darse a conocer. Cuando la función fue cumplida, separación al canto.
Y como éstas relaciones, muchas más. Cantantes que salen con actrices o actores que salen con la modelo del momento. No estoy diciendo que todas las relaciones sean falsas pero sí una gran parte. No es oro todo lo que reluce y las falsas relaciones son una muy buena pormoción.
Por eso es un cantazo el Rob-Sten. Nunca han estado de vacaciones. Nunca les hemos visto pasear de la mano como una pareja normal. Nunca les hemos visto tomar café o sentarse en la terraza de un bar. Jamás les hemos visto solos. Siempre van con amigos, publicistas y con la prensa detrás. Incluso hay una foto manipulada de ella con los padres de Rob para intentar hacerlo más creíble.
Otro cantazo fue la "reconciliación" 5 días antes de que Rob empezara la promoción en Australia. También dijimos que el "beso" llegaría con la última película y así fue. No se le puede calificar de beso a lo que hicieron en la casa de ella pero es lo máximo que veremos, a estas alturas.También dijimos que ellos aparecerían juntos durante las 2 primeras semanas de la película en los cines y se cumplió. Es predecible porque es el mismo patrón de siempre.
Luego la adúltera va a Londres. Aparecen en una foto con mucha gente y a metros de distancia y ya lo tienen hecho. El rebaño buscará excusas para esa distancia y no importa si no hay más fotos de ellos juntos; les basta con estar en el mismo país porque las enfermas inventarán el resto.
Ahora Rob está en Australia y si la adúltera va, será justo para la salida del dvd de la película. Vamos, lo de siempre.
Que me dejen de cuentos porque una pareja real jamás se esconde y le importa una mierda lo que piensen los demás. Es un juego y volvió a quedar demostrado hace un par de meses. La adúltera hace un comunicado tras las fotos Rupsten diciendo que ama a Rob. Luego le preguntan en un programa de televisión si son pareja y ella dice: "Keep them guessing". ¿En serio? ¿Pasa del "amo a Rob" a "mantenerles suponiendo"?
Si odias la atención, ¿por qué no confirmar la relación y así la prensa dejará de seguirte? ¿Por qué llevar una chaqueta parecida a la de Rob en la mano y no guardada en la maleta, si no buscas atención? Porque si confirman la relación, se pierde la gracia. Y si la adúltera deja de llevar prendas parecidas a las de Rob, se queda sin fichas para jugar. El montaje va a terminar sin confirmar nada y así ha sido desde el principio.
Os dejo este artículo en el que habla de cómo se hacen las cosas. También hablan de cuentas "fantasmas" en Twitter que cuentan lo que es necesario. ¿Os suena @LuluRobsten? Es una cuenta fantasma siempre favoreciendo al circo. A eso le sumamos los "amigos" de la adúltera que no paran de hablar de ella y de Bear, para hacerlo todo más creíble.
Os dejo un ejemplo de las tonterías que llega a escribir con tal de mantener la fantasía.
Incluso medios asociados como Gossip Cop, Lainey Gossip, etc.
Os dejo un extracto. El artículo completo podréis leerlo aquí. Es muy interesante y cuenta varios de los montajes que se vienen dando desde hace 100 años.
The Rules of the Game - A Century of Hollywood Publicity
This type of direct publicity has become the most effective means of establishing and texturing star image. Sure, many celebrities employ “ghost Twitterers,” most have little to do with the design of their web presence, and some even employ professional leisure photographers to take seemingly candid personal photos. If you look hard enough, the evidence of publicity manipulation slowly comes to light. What matters, however, is that the pleasures garnered from direct publicity are such that they discourage scrutiny.